- El nombre correcto de la espuma de la cerveza es giste.
- La espuma de la cerveza ayuda a conservar sus aromas y sabores.
- La cantidad de espuma un vaso de cerveza no debe ser mayor a dos dedos.
Si eres un amante de la cerveza sabes que una de sus principales características es esa capa de espuma blanca que flota sobre la bebida y que, al terminar la bebida, deja un leve rastro en las paredes del vaso, pero ¿alguna vez te has preguntado por qué se forma y cuál es su función?
Lo primero que tienes que saber es que el nombre correcto, de lo que conocemos coloquialmente como “espuma de la cerveza”, “cabeza” o “corona”, es giste, término que proviene del alemán gisth.
El equipo de producción de Cerveza Fortuna explica que el giste se forma por la liberación del dióxido de carbono (CO2) presente en la cerveza, cuando el líquido entra en contacto con el medio ambiente.
En este sentido, la espuma de la cerveza, más que definir la calidad de la bebida, habla del proceso de elaboración y de una buena ejecución de una de las fases más importantes: la fermentación o maduración, que es cuando el alcohol comienza a liberar y se genera CO2, permitiendo la gasificación natural de la cerveza. El giste es un elemento muy importante de la cerveza pues, constituye una barrera de protección que evita la oxidación de la bebida y permite la conservación de sus características organolépticas. Además, la formación de la espuma ayuda a liberar todos los aromas propios de la cerveza, los cuales provienen de ingredientes tales como lúpulo, maltas o levaduras.
Si bien, la espuma es una característica física de la cerveza, esta se aprecia mejor cuando es servida en un vaso y la cantidad dependerá del estilo de cerveza de tu preferencia, aunque generalmente no deberán ser más de 2 dedos.
De acuerdo con los expertos, un buen servicio es esencial para garantizar la adecuada liberación de gas y la formación de espuma. Para ello, se deben considerar tres factores: la temperatura de servicio, la cual puede variar entre 0 y 3°, la disponibilidad de vasos limpios y adecuados para el estilo que se va a servir y el protocolo de servicio.
“Para servir de forma correcta la cerveza, es necesario inclinar el vaso a 45°, llenar un poco más de la mitad y comenzar a enderezarlo poco a poco, de manera que se pueda controlar la formación de espuma”, detalló el equipo de Cerveza Fortuna. Al final, la espuma de la cerveza, no sólo te hablará del proceso de elaboración y la calidad de los ingredientes utilizados, también te ayudará a disfrutar más del cuerpo, aromas y sabores de la cerveza en cada trago.
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